- Aunque las provincias de Melipilla y Talagante, junto a la de Maipo, siguen siendo un vergel para la región Metropolitana, esa condición camina más a la extinción.
Un panorama que a diario se percibe a simple vista en las comunas rurales, fue respaldado recientemente por un estudio del Ministerio de Agricultura, bajo el título: “Catastro Frutícola 2023”, el cual realiza un análisis de cifras comparativas entre el periodo 2020 y 2023 y que deja en evidencia el deterioro de la actividad frutícola que caracterizó a la región y, especialmente, a zonas como las provincias de Melipilla y Talagante. No sólo son menos la cantidad de huertos dedicados, sino también la superficie destinada para esta variable de la agricultura.
Menos es menos
Un primer dato que arroja el estudio del *Ciren señala que la cantidad de huertos dedicados a la plantación de distintas especies frutícolas en la Región Metropolitana descendió entre el 2020 y el 2023 en un 8,0%, pasando de 3.074 a 2.827 predios. La disminución de esta apuesta productiva tuvo una consecuencia inmediata según este estudio, de modo que durante el periodo observado se registró una disminución de la superficie rural destinada para tales efectos, cercana a las 190 hectáreas (0,3%), pasando de las 54.661,71 a 54.472,45 hectáreas.
Por otra parte, este informe entrega datos respecto de las especies cultivadas y señala que las mayores plantaciones de frutales en la Región Metropolitana corresponden al cerezo, carozo que ha experimentado una fuerte explotación entre el año 2020 al 2023, transitando de las más de 3 mil 600 hectáreas dedicadas a más de 5 mil 400 hectáreas, con un incremento de 47,5%. También se observa un incremento importante del limonero, que comienza el periodo con 3.302 hectáreas a las 4 mil 9 que registró el 2023, aumentando en 21,4% la superficie destinada a la producción de limones.
Modificaciones que configuran la explotación hoy día
No obstante, el incremento en la plantación de este tipo de especies, el informe del Ciren indica que el nogal sigue siendo el más cultivado en 
la Región Metropolitana, aún a pesar de haber sufrido una fuerte disminución de la superficie explotada, puesto que el año 2020 existían plantaciones por más 16 mil 430 hectáreas, mientras que esa cifra descendió a las 15.521,59 hectáreas hacia el 2023. Es decir, aun cuando la plantación de nogales cayó en un 5,5%, sus más de 15 mil 500 hectáreas la ponen por sobre otros frutales en la RM.
En cuanto al riego, el estudio de Ciren y el Minagri da cuenta de la profunda transformación que ha tenido el sistema de riego en la agricultura en la región Metropolitana, incluida nuestra zona, en las últimas décadas. Así, la principal fuente de riego es tecnológica con un 81,7% de riego por goteo, seguida a mucha distancia por la “microaspersión” que hoy riega un 9,3% de la superficie plantada, y solo un pequeño porcentaje aún realiza estas labores a través de medios tradicionales, en un 8,5% mediante riego por surco, y un 0,4% que todavía utiliza el riego extendido.
Un territorio aún productivo de especies frutales
La principal zona de producción frutícola de la Región Metropolitana es la provincia de Melipilla, seguida por Maipo, y en tercer lugar se ubica la provincia de Talagante. En tal sentido, la primera de ellas poseía hasta la temporada 2023 un total 580 huertos dedicado a la explotación de frutales, mientras que la provincia de Talagante su ubicaba en el tercer lugar con 310 predios, localizándose aquellas explotaciones de mayor extensión en la provincia de Melipilla, con 45 predios por sobre las 500 hectáreas.
De igual modo, por lejos, la provincia de Melipilla lidera la superficie dedicada a la plantación de árboles frutales de toda la región 
Metropolitana. Según el estudio del Ciren hacia el 2023 la provincia de Melipilla mantenía un superficie plantada de poco más 26 mil 455 hectáreas, le seguía la provincia de Maipo con 14 mil 994 hectáreas y, en tercer lugar, la provincia de Talagante con más de 6 mil 285 hectáreas, demostrando que estas tres zonas metropolitanas constituyen la principal fuente de ingresos por producción y empleo asociado a la explotación de árboles frutales.
Por último, el estudio encargado por el Ministerio de Agricultura señala que el principal destino de toda esta producción lo concentran las exportaciones con 43,87% de la producción de árboles frutales plantados en la Región Metropolitana. El segundo lugar, lo ocupa la agroindustria con un 30,07% de la producción, mientras que las frutas destinadas al mercado interno, es decir para la venta en grandes, medianas y pequeñas ferias, así como el comercio en supermercados u otros asciende al 20,05% del total de los primores producidos en la región, incluida nuestra zonas rurales destinadas a la plantación de árboles frutales.
*Ciren: Centro de Información de Recursos Naturales.